Energía administrada

Eólica

La energía eólica aprovecha las corrientes de viento para hacer girar un rotor y transformar la energía cinética de estas corrientes en energía eléctrica. Esta transformación se hace mediante un generador eléctrico conectado al sistema mecánico del rotor. Los sistemas eólicos consisten en un subsistema de captación, un subsistema mecánico con control de velocidad y un generador eléctrico con sus respectivos controles.

El propósito del sistema mecánico es hacer girar el eje del generador a la velocidad requerida para el mismo. En cuanto al subsistema de captación, este se compone principalmente de un rotor que gira con las corrientes de viento. Es la parte principal del sistema eólico y también la más cara. Este rotor se monta sobre una torre de altura considerable (usualmente mayores a 50m) para instalaciones comerciales.

Ventajas
Las ventajas de los sistemas eólicos incluyen la sostenibilidad a largo plazo, al ser un recurso infinito es posible obtener energía por periodos de tiempo considerables. También los costos de estos sistemas se han reducido en años recientes lo que lo vuelve una tecnología competitiva en cuanto a costos.

Desventajas
Las desventajas incluyen que es un recurso intermitente, por lo cual la producción de energía es altamente variable. Esto presenta dificultades al momento de realizar los estudios financieros para predecir la sostenibilidad económica del proyecto. Otro especto relacionado a la variabilidad del viento es que la energía producida no es almacenable, debe ser consumida al momento de producirse.

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